Trabajo Freelance |
Los periodistas son un claro ejemplo del trabajo
freelance, así como también los informáticos, diseñadores gráficos, fotógrafos,
traductores y muchos otros profesionales. Algunos sectores como el Turismo,
Ventas o la Consultoría, también suelen emplear trabajadores “freelance” para
actividades o proyectos puntuales.
El freelancer generalmente trabaja fuera de la empresa,
incluso a veces en otra ciudad o país. El ejemplo del Teletrabajo es una nueva
herramienta de gran utilidad en tal sentido. Hoy día, muchos de estos trabajos
se realizan “en red”, quienes trabajaban de modo solitario ahora pueden intercambiar
sobre la profesión.
En cuanto a la relación laboral, la misma deberá contemplar
las formalidades exigidas por la ley, por lo cual el sistema más usual es la
creación de una Empresa Unipersonal o SRL, que permita operar en un marco de
legalidad.
El contrato con el freelance se puede formalizar
de diversas maneras. En algunos casos se formalizan por escrito las condiciones
de la relación y en otros simplemente hay un acuerdo verbal. Tampoco hay reglas
fijas sobre el pago, a veces el pago es por adelantado y otras al finalizar el
trabajo o se combinan las dos modalidades. Para proyectos más complejos, un
contrato puede establecer un cronograma de pagos basados en etapas o metas.
En general la retribución se pacta en función del
resultado obtenido ya que como el freelancer se desempeña fuera de la
supervisión de quien le encarga el trabajo le resulta imposible a éste
controlar el tiempo empleado en la tarea. Sin embargo, en ciertas actividades o
casos especiales puede pactarse una tarifa por tiempo empleado.