Claves para una transformación cultural exitosa

Días atrás, el MTSS organizó el seminario “Aportes de las principales consultoras en Gestión Humana a la promoción de una Cultura del Trabajo para el Desarrollo". En el marco de dicho evento, Verónica Melián, Socia de Capital Humano de Deloitte, propuso reflexionar sobre las claves para una transformación cultural exitosa.

La importancia de la cultura

Sin lugar a dudas, el tema cultura, es de gran preocupación para las organizaciones de hoy día. “Según los resultados de la cuarta edición del informe de Tendencias Globales de Capital Humano 2016 realizado por Deloitte, en nuestro país el 73% de los encuestados considera la cultura organizacional como importante o muy importante”, señaló Melián, sin embargo, únicamente un 5% de estas organizaciones afirma estar en camino hacia el logro de la cultura deseada.


“La definición de cultura organizacional es muy amplia, pero podemos resumirlo como ese conjunto de supuestos básicos compartidos; los valores y creencias que caracterizan la forma cómo se hace el trabajo dentro de una organización. De esta manera, la cultura es moldeada por las acciones y direcciones de los líderes, sostenida a través de los comportamientos de las personas y reforzada a través de los sistemas, políticas y procesos organizacionales”, indicó la expositora.

Para Melián, es importante destacar que no hay culturas buenas o malas, sino culturas alineadas en mayor o menor medida a la estrategia organizacional.

¿Cómo iniciar la transformación cultural?

Una de las claves para el logro de la cultura organizacional deseada es identificar la brecha que hay entre el “cómo hacemos las cosas hoy” y “cómo deberíamos hacerlas”, según los objetivos estratégicos de la organización. A la hora de embarcarnos en una transformación cultural, lo primero es saber qué elementos de nuestra cultura queremos mantener y cuáles cambiar.

Para ello, resultará necesario identificar cuáles son los supuestos subyacentes que guían el comportamiento de las personas de nuestra organización. Por ejemplo, si parte de la estrategia organizacional es fomentar una cultura de trabajo en equipo, pero en los hechos las oficinas están dispuestas de tal forma que el intercambio entre las personas se hace muy difícil (al no existir salas de reunión o espacios comunes), el mensaje que estamos enviando a nuestros colaboradores se vuelve contradictorio.

Hacer énfasis en reforzar el cambio de aquellos comportamientos clave que van en contra de la cultura que se quiere impulsar resulta crítico, desde la forma en que la organización se estructura, el código de vestimenta implícito, los estilos de comunicación, la forma de trabajar, así como las historias que se cuentan, “de lo que se conversa son las realidades que se construye”. 

Tips

Para finalizar su exposición Verónica Melián destacó aquellas primeras acciones por dónde pueden comenzar las organizaciones que se proponen transformar su cultura, asegurando que este será un camino de mucho trabajo pero con importantes resultados positivos.

Comenzar por medir la cultura actual, identificar claramente la cultura a la que se quiere llegar, monitorear los avances periódicamente y recordar que la gestión cultural es tarea de los líderes organizacionales y no solo de RRHH, son los primeros pasos para lograr una transformación cultural exitosa.