¿Cuáles son los aspectos claves a tener en cuenta durante una entrevista laboral?


Contribución de la Sociedad Uruguaya de Gestión de Personas (www.gestiondepersonas.org.uy) elaborada por el Lic. Rony Cohn.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE)[i] el promedio de horas habituales de trabajo  que realizaron los uruguayos en el año 2014 fue de 39 horas semanales. Como se puede observar, gran parte de nuestras horas las destinamos a la actividad laboral. Por esa razón, es sustancial poder adecuar y compatibilizar siempre la persona al puesto de trabajo y viceversa. Para esto, los entrevistadores debemos estar preparados y formados para las Entrevistas de Selección de Personal, que son la “puerta de entrada” a cualquier empresa con la importancia que tienen las mismas. Muchos pensarán que una Entrevista de Selección de Personal inicia en el instante  que llega el candidato a la misma, pero la misma comienza en el momento que está surgiendo la vacante y vamos elaborando el perfil del cargo. Desde ese entonces, se irá pensando cuál sería la persona más adecuada para el puesto (vacante), en función de la empresa que se trate.

Una vez publicado el aviso y realizada la preselección de Currículums, un paso que se considera neurálgico para este proceso sería la realización de la primera llamada a los posibles postulantes.  En dicha instancia, habitualmente se procede a explicar brevemente el cargo que se está seleccionando, así como también, se puede aprovechar para dar un paso más: realizar ciertas preguntas claves (anteriormente pensadas) que pueden orientar desde ese preciso instante la búsqueda y empezar a conocer al postulante con mayor profundidad.  A esta instancia se la podría denominar como entrevista telefónica, siendo el análisis posterior de dichas respuestas las que proporcionarían ciertas pistas del candidato a entrevistar.

Durante la entrevista propiamente dicha, lo primero que sería conveniente observar es la forma y actitud en que el candidato está esperando para ser entrevistado. Por ejemplo, es distinto si el candidato está esperando sentado en el lugar, o parado y caminando, sentado comiéndose las uñas, o leyendo u observando información de la empresa, entre otras posibilidades, dado que esto nos sigue brindando información acerca del mismo.

Adhiero a lo que expresa Joe Navarro[ii] que más del 80% de nuestra comunicación con los demás tiene lugar mediante señales no verbales, que es lo que se conoce como lenguaje corporal (expresiones faciales, gestos, movimientos físicos, postura e incluso el tono de voz).
Un buen entrevistador debe poder interpretar estas señales no verbales que son emitidas muchas veces de manera inconsciente por el entrevistado. Esta es una habilidad que es importante desarrollar porque permite recabar muchísima información del candidato.

Otro aspecto a tener en cuenta es el discurso del postulante, que se podría decir es uno de los elementos esenciales a tener en cuenta en la entrevista. Muchas veces nos encontramos con candidatos que son verborrágicos en su discurso, otras veces con candidatos que hablan muy poco, en otros casos candidatos que hablan lo suficiente para responder las preguntas que se le realizan. Todo esto debe ser observado ya que “nos dice algo” de la forma de ser del postulante. A su vez, dilucidar si el discurso se realiza en consonancia con los gestos que va realizando el candidato es importante poder observarlo.

Asimismo, la vestimenta tiene que ser tenida en cuenta en función del cargo que se esté buscando pero a la vez del rubro de la empresa. Si la posición buscada es operativa (auxiliar) o estratégica (jefe o gerente). No por el hecho de que el candidato llegue vestido de una manera informal debe ser “penalizado”, ya que muchos rubros (como el informático, call center) suelen ser aceptadas dicha forma de vestir. Se debe evaluar si la vestimenta que utilizó es esperada para el rubro y cargo.

Poder percibir si el candidato tiene motivación intrínseca no solamente frente al cargo que se postula, sino también como parte de su carácter, podría marcar la diferencia entre los candidatos. Me refiero a lo que plantea Frank Luntz[iii] acerca de las personas que son motivadas por algo más fuerte o profundo que el mero interés o curiosidad, donde el hacer un esfuerzo extra y más también,  es buscado para superar las expectativas que se tenían. Este detalle sutil puede ser el diferencial para la elección.

Por último, me gustaría señalar que siempre es importante una vez finalizada la entrevista el análisis de la misma. En ese momento, es vital poder tener en cuenta el perfil que se estableció, pero a la vez dejar abierto un margen de posibilidad, ya que quizás nos encontremos con postulantes que por su forma de presentarse “no parecerían ser” el perfil buscado, pero que quizás tienen un gran potencial y talento a desarrollar. Muchas veces se puede cometer el  error que expresa   Estanislao Bachrach[iv] cuando afirma que el ser humano siempre tiende a utilizar la misma información para resolver cualquier tipo de situación, con parámetros y estructuras de pensamientos repetitivos. Es decir, más allá de tener la información del perfil del cargo que se está buscando y esperando, ser flexibles en cuanto a los diferentes candidatos que pueden presentarse, ya que sino quizás el entrevistador podría perderse de candidatos extraordinarios para la empresa.





1.      www.ine.gub.uy
2.      Navarro, Joe (2008). El cuerpo habla. Barcelona, España.
3.      Luntz, Frank (2012). Ganar. España.
4.      Bachrach, Estanislao (2014). Ágilmente. Buenos Aires, Argentina.