Cultura de Trabajo y Educación
Días atrás DERES organizó una conferencia en el Auditorio de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios del Uruguay para mostrar algunas iniciativas educativas que son desarrolladas en lugares de contexto socio-económico crítico de nuestro país y que se destacan por los buenos resultados alcanzados.
Esta conferencia se enmarca dentro de las líneas estratégicas definidas por DERES “la cultura del trabajo”. La relación trabajo-educación es una de las mayores preocupaciones de los empresarios, al igual que la de muchos otros actores de la sociedad. Los altos índices de deserción escolar y liceal inciden en la buena preparación de los jóvenes hacia una correcta inserción laboral.
Desde el punto de vista de la empleabilidad, estas experiencias permiten que los alumnos que egresan estén mejor preparados para ingresar al mercado laboral no solo por los conocimientos adquiridos sino también gracias a la internalización de hábitos y habilidades blandas.
Según se mencionó en la conferencia, el último estudio que realizara Deloitte para Unicef (“¿Qué están haciendo las empresas uruguayas por la infancia?”) mostró que el 57% de los programas desarrollados por las empresas en el área “Apoyo a la Comunidad”, están orientados a la educación.
Muchas de estas iniciativas se enmarcan dentro de las políticas y estrategias de RSE que desarrollan las empresas, en la que tienen una participación e incidencia importante en su proceso y gestión.
Para preparar la conferencia, directivos de DERES se reunieron con el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, quien ha manifestado en más de una ocasión su preocupación por la cultura de trabajo.
El ministro abrió la conferencia y enfatizó que la estrategia principal del Ministerio para los próximos 5 años de gestión es la cultura del trabajo para el desarrollo. A su vez, afirmó que Uruguay ha perdido y decaído en cultura del trabajo, siendo necesario hacer cosas concretas y coordinadas, algo imprescindible para el desarrollo del país.
“En Uruguay se trabaja mucho pero hay que mejorar la calidad del trabajo, la ética y la productividad. Esto no es sólo un tema de los trabajadores sino también de los empresarios”, expresó. Remarcó la necesidad de contar con mejores trabajadores y mejores empresarios pensando en un Uruguay cuyo crecimiento debe darse con empresas sostenibles.
Consideró que este tipo de iniciativas, nacidas desde una organización de empresarios que promueve la Responsabilidad Social Empresarial, son proyectos que desde su cartera quieren apoyar dado que “es imprescindible que en Uruguay se mejore la articulación entre educación y trabajo”.
La actividad contó con dos paneles que dieron respuesta a las preguntas planteadas. El primero estuvo integrado por representantes del Liceo Espigas, del Liceo Francisco, Liceo Impulso y el Centro Educativo Providencia. En esta instancia se abordaron las experiencias y de qué forma logran inculcar en jóvenes provenientes de contextos críticos, una visión de futuro.
Coincidieron en la importancia del involucramiento de las empresas, que va más allá del aporte monetario. Álvaro Cristiani, integrante del equipo de dirección del Liceo Jubilar, expresó que sesenta jóvenes egresados van a la universidad y tienen un acompañamiento por parte de voluntarios de las empresas, quienes hacen un seguimiento a efectos de evitar el abandono.
El segundo panel estuvo integrado por representantes de Ánima Bachillerato Tecnológico, de la Dirección de Educación de Jóvenes y Adultos (CODICEN), de la Fundación Forge, del Centro Educativo Los Pinos y del Programa de Culminación de Enseñanza Secundaria (ANEP). En este caso, el foco estuvo en las experiencias de preparación e inserción de jóvenes en el ámbito laboral.
Estela Alem (CODICEN) comentó de qué forma la Dirección que está a su cargo pudo acordar con una empresa para que se destinara un espacio para formar un aula y permitir que un primer grupo de trabajadores con intención de continuar Ciclo Básico pudiera culminar Primaria.
Por su parte, Ximena Sommer (Ánima) explicó que la institución tienen como modelo educativo el “modelo dual”, el cual combina la educación formal de los jóvenes con prácticas laborales formativas en empresas, que difiere de las pasantías ya que implica un mayor compromiso de la organización.
Pablo Bartol (Los Pinos) remarcó que una de las mayores diferencias entre estas experiencias de gestión privada y acceso gratuito y el sistema estatal es que en la enseñanza pública hay un alto nivel de ausentismo docente. Consideró que este es un mensaje negativo que se contrapone con la generación de una cultura de trabajo en los jóvenes.
